miércoles, 7 de octubre de 2009

El drama de la educación y de los egresados de estas carreras




Alberto, es un joven de 25 años, acaba de culminar sus estudios en la carrera de educación de la UNA-P, y me cuenta entusiasmado: “me acaban de dar una plaza en un colegio particular, podré pagar mis deudas. Sabe profesor (…), me presté dinero para hacer los trámites de mi bachiller, y lo de mi tesis; (risas…), ¡después dicen que la U es gratis! cuando te sacan todo y lo peor es que se demoran y los jurados de las tesis se hacen los ricos por una firma”. Lo veo durante las primeras semanas entusiasmado, me comenta sobre su experiencia, sobre las travesuras de lo jóvenes, me dice “los enanos son jodidos, antes que yo diga algo se me adelantan en todo”, con el pasar del segundo mes empiezo a notar que se halla un poco incómodo, ya no habla con el mismo entusiasmo sobre su trabajo, antes solía venir constantemente a que le preste uno libros, un poco de material como dice él.

Hace un par de semanas me comentó algo lamentable, con tono de desesperación y tristeza me dijo que estaba pensando en irse a trabajar a una mina. Sólo entonces me atreví a preguntar sobre el trabajo, por cómo le iba, y el porqué de esa decisión. Casi con lágrimas en los ojos me contó algo que sigue siendo un problema que nadie regula. “han pasado varios meses y cada vez que voy a cobrar me dicen que vuelva, que tengo que conversar con el coordinador, que lo de la Gripe, que tienen actividades y cuando me encuentro con él y me atrevo a cobrarle, me dice siempre que me pagarán en junto, que es un ahorrito y que mientras tanto teme un adelantito y me alcanza unos soles, que no alcanzan ni para los pasajes y yo tengo deudas, tengo que pagar el alquiler del cuarto, la comida, porque mis padres son del campo (…)”. Trato de aliviarlo y con el pasar de los días me adentro en el problema, cada vez que me encuentro con egresados siempre les pregunto sobre el cómo les va en los trabajos, algunos tienen noticias agradables; sin embargo la gran mayoría (de los que laboran en las instituciones privadas tienen ese problema).

Esto se agrava con algo muy triste, un gran porcentaje de quienes trabajan en centros preuniversitarios me dicen que mucho de lo que la universidad les da como presupuestos teóricos no va de acuerdo ni siquiera con lo contenidos que un examen de ingreso exige, que hay un gran “divorcio entre universidad y los colegios”, lo peor es que la universidad también se divorcia de sus egresados, los abandona a su suerte, y no existe ningún mecanismo para aliviar esto, para fomentar una relación continua con las personas a las que formó.

Pero volvamos al tema (en torno a los egresados), lo que les pagan, si es que les pagan realmente es una miseria, el costo por hora es de S/. 2.50 a S/. 3.00 y que incluso no cada vez que tienen una actividad como desfiles, actuaciones, etc., les tiene que descontar. María, otra egresada me dice casi con burla y con tono de indignación “que a veces incluso salen debiéndoles a estas instituciones”.


El Perú es realmente un país muy agreste en su geografía social, en su temperamento colectivo. Reclamamos unidad en un espacio en el que los conflictos se acrecientan cada vez más, y se acrecientan también las diferencias sociales. Obviamente ante ello una de las directivas sociales de mayor preocupación es la de hacer posible un país más equitativo y con mayores oportunidades en todos los sectores; sin embargo, lograr que en la realidad haya un desarrollo humano en igualdad de condiciones es casi imposible.
Uno de los fines máximos de la educación es la de desarrollar un espíritu solidario en sus ciudadanos, en toda la población y para ello se ha diseñado un perfil del ciudadano y a ello también deberían estar orientadas las directivas nacionales. Así tenemos como letra muerta, cuando no, lo estipulan documentos como el DCN en el que se menciona orondamente que “Conforme al mandato de la Ley General de Educación, debemos asegurar la formación de personas que participen en la construcción de un mundo más justo y más humano, haciendo de la institución educativa, un espacio de construcción de relaciones equitativas entre niños y adolescentes de distintas culturas y condición social. Además, consideramos la responsabilidad de incorporar a las personas con necesidades educativas especiales desde una perspectiva inclusiva, para ellos se requiere de adaptaciones curriculares de acuerdo con su necesidad”. Cuando ocurre precisamente lo contrario.

Cuando alguien elige una institución educativa para su menor hijo, o el ser querido, lo primero que piensa es en proveerle de lo mejor (maestros, infraestructura, contenidos curriculares por área, orientación educativa, perfil del centro, etc.), lo que conlleva obviamente a una educación diferenciada, de mayor calidad a la brindada por los centros estatales. Y es que, es parte de nuestra cultura el querer siempre “lo mejor” para los seres amados (aunque ese “lo mejor” sea sólo un cliché), y en la búsqueda de ello se hacen las selecciones correspondientes. Uno elige un colegio con una orientación religiosa (ya sean católicos o protestante, como podrían serlo definitivamente colegios como “San Juan”, “La Merced”, La Inmaculada”, “Villa Fátima” o “El Adventista”) porque tiene la esperanza que en estos colegios citados la enseñanza tenga un tiente de respeto, de valores, que doten a quienes estudian en estos centros de un espíritu humanista y solidario. Sin embargo ello no siempre se da, generalmente, lo que se logra es que aparezcan prejuicios (como “el mi hijo estudia en tal colegio” y mira como anda el del fulanito, y si ello por parte de los padres de familia; y qué se puede esperar de los pobres jovencitos que realmente creen, porque así se los han hecho creer, que el estudiar en estos colegios los hacen más que el resto), esas diferencias se dan también en el seno mismo de la Institución esa, las diferencias económicas de las que proceden los predisponen a crear un ambiente de discriminación y maltrato moral a quienes participan de dicho ambiente. Ello se hace más notorio cuando la actitud de los directivos de esas instituciones es alejada de todo espíritu humanista, altruista y solidario. Cuando hay un mercader escondido tras la imagen, en modo genérico, del pastor, de la hábito y del rosario. En donde la preocupación por el rezo y la infraestructura pesa más que la práctica real de todos los valores que una sociedad justa y cristiana puede perseguir, del mismo modo en la de sus maestros ¿este será el caso de nuestra región?


De qué tipo de perspectiva inclusiva estamos hablando, si las diferencias salen a borbotones, de qué valores se pueden hablar si se atropellan dignidades en forma colectiva (no sólo la del maestro, la del alumno, la del padre de familia, la de la colectividad que valida su labor pedagógica). Si bien se ha tratado de crear, erróneamente, una sociedad que valide la visión de escuela-empresa no debe ser esta la orientación en la que el administrador por lograr mejores beneficios económicos descuide horrorosamente cada uno de los puntos que señalamos a continuación:

a) Formación en valores humanísticos y respeto de la identidad individual y cultural (de la comunidad educativa en la tienen incidencia).
b) Incidencia en la inclusión colectiva de sus estudiantes.
c) Formación académica actualizada (de acuerdo a estándares y a supervisiones constantes por parte de especialistas)
d) Un matrimonio con la cultura regional, con los planes estratégicos de desarrollo social, con un verdadero impacto en la sociedad.
Todo para lograr cierta concordancia con los fines de la educación peruana:
a) “Formar personas capaces de lograr su realización ética, intelectual, artística, cultural, afectiva, física, espiritual y religiosa, promoviendo la formación y consolidación de su identidad y autoestima y su integración adecuada y crítica a la sociedad para el ejercicio de su ciudadanía en armonía con su entorno, así como el desarrollo de sus capacidades y habilidades para vincular su vida con el mundo del trabajo y para afrontar los incesantes cambios en la sociedad y el conocimiento”.


b) “Contribuir a formar una sociedad democrática, solidaria, justa, inclusiva, próspera, tolerante y forjadora de una cultura de paz que afirme la identidad nacional sustentada en la diversidad cultural, étnica y lingüística, supere la pobreza e impulse el desarrollo sostenible del país y fomente la integración latinoamericana teniendo en cuenta los retos de un mundo globalizado.


La educación, como siempre, sigue siendo un instrumento de dominación cultural y que además obedece a intereses hegemónicos, en los que el servicio privado más bien orienta al desarrollo de una sociedad de la diferencia, de la etiqueta, la marginación y la barbarie cultural e ideológica, en donde la pose del que envía sus hijos a un centro de esta naturaleza es la del “ya no ya”, “del que es más que el resto”, típicas actitudes del huachafo que pretende ser quien no es. Lo que no es generalizado, ya que la gran mayoría realmente cree que al poner a sus hijos en estas instituciones logrará ese añejo anhelo de brindarles una educación digna y de calidad que el estado no garantiza.

Obviamente no podemos mencionar a todos los colegios particulares, ya que ni siquiera cumplen con las disposiciones del Ministerio de Educación, en torno a su denominación, es decir a su nombre:


Para que una institución posea el permiso de funcionamiento, ésta debe contar con lo siguiente:
CAPITULO IV/ DE LA DENOMINACIÓN
Artículo 23º.- Las Instituciones Educativas podrán llevar el nombre propio de:
Personajes fallecidos y acontecimientos relevantes de la historia nacional o universal.
Héroes que dejaron un digno ejemplo para la juventud y la nación peruana.
Personajes ilustres y educadores ya fallecidos que contribuyeron notablemente al desarrollo y progreso de la educación, la ciencia y la cultura.
Países hermanos cuyos lazos de historia, amistad, cooperación e identidad de acciones benéficas, las unan a la Patria.
Denominaciones que por su significado y trascendencia contribuyan a realzar los fines y objetivos de la educación peruana.
Y en nuestra localidad encontramos nombres que no pertenecen a nuestro imaginario (la lista es larga, nombres de instituciones educativas cuya descripción se halla en otros idiomas y qué nada tienen que ver con nuestra cultura, y que incentivan una predisposición hacia la enajenación cultural, a una perspectiva de la alienación y que por si fuera poco no tienen un compromiso real con la educación y son tan sólo son simples negocios orientados a lucrar con la fachada y con el lobby de la tan esperada o el sueño de una educación digna y de calidad).

Así, cuando alguien habla y sostiene que: “El DCN fomenta el conocimiento y respeto de las diversas culturas de nuestro país y del mundo, reconoce la necesidad imperiosa por convertir el contacto entre las culturas en una oportunidad para aprender y aportar desde nuestras particularidades. Hay que llegar a la práctica intercultural, fomentando el diálogo intercultural, reconociendo el dinamismo y permanente evolución de cada cultura”. Hay que pensarlo dos, tres, y hasta mil veces, de sociedad inclusiva, sólo tenemos el nombre y mil frases que se emplean para crearnos un ambiente de la mentira y la mediocridad, mediatizada y alzada en el poder.

Por si fuera poco, estas instituciones educativas no poseen una acreditación social real, ya que actualmente no aportan al desarrollo real, ni social de la región (en realidad tampoco culpemos de esto sólo a estas instituciones, sino también a las estatales y a varias otras de ingerencia gubernamental). Los resultados son claros.

Los informes de logro de desempeño de los especialistas de las diversas Ugels de Puno, nos demuestran algo alarmante, para los puneños. Desde hace más de cinco años, las instituciones educativas de la ciudad de Puno (entre estatales y privadas) no logran posesionarse de premios o galardones en concursos argumentación y de debate (en relación a este último, lo digo además porque he tenido casi una participación como jurado calificador de los dos últimos concursos, en los que las provincias han salido siempre airosas), lo digo con hondo dolor cómo los profesores del área de comunicación no ponen de su parte, y parece que ello les agobia y sólo les interesa la remuneración y no el desarrollo intelectual de sus estudiantes. Tampoco en los concursos de comprensión, menos en los de redacción y ni qué decir en los certámenes institucionales. Casi todos los premios de los que se ufanan están organizados por instituciones privadas y cuyos resultados son manipulados. Tan manipulados, que casi llegan incluso a concursos de prestigio de matemática y de otras ramas a fines. Las compras de galardones y de premios para efectos marketing están al asecho.

El colmo, sobrepasa toda conchudez cuando se intenta lanzar un plan lector para que los alumnos mejoren estas capacidades de lectura; pero antes se efectúan negociados con editoriales que ofertan libros que no pudieron vender por la mala y pésima calidad, y los venden en costos exageradísimos. Todo bajo una conversación previa, una especie de “jafa na jafa” o a ese famoso “a medias nos repartimos lo que los incautos padres de familia paguen”, caro, en una sociedad donde no se lee es fácil engañar, y hacer creer que con esa lectura nuestros hijos efectivamente lograran deleitarse y amaran los libros. (Por razones de espacio, mientras configuro bien las estadísticas que tengo a la mano y cotejo bien los datos, para no ganarme un juicio por injuria, o por mal manejo de información, le prometo que les seguiré hablando del tema, siempre que ningún virus afecte mi ordenador o acaso alguien le rece a santa teresita para que me aleje de mi preocupación el tema de educación, que desde ahora iré abordando tanto en mis notas del diario)





Beso de lluvia: Literatura puneña





Escribe: Boris Espezúa Salmón


La publicación de “Beso de la Lluvia” Literatura Puneña, en dos tomos es registrada en el año 2008, y es una publicación realizada por CARE- Perú, dentro del marco del proyecto Calidad y Equidad en la Educación Intercultural en Puno, junto a estos esfuerzos se halla también la publicación del Libro Etnohistoria del Altiplano de Puno del Antropólogo Juan Palao Berastaín, junto a otras publicaciones. Estos libros son financiados por la Comisión Europea con la finalidad de mejorar el aprendizaje de niños y niñas andinos, las competencias de docentes y el fortalecimiento de las capacidades de la comunidad local. Nuestro comentario se centra en el “Beso de la Lluvia” cuya selección, notas y estudio crítico estuvo a cargo de José Luis Velásquez Garambel, a quien felicitamos por tan encomiable trabajo, que ha seguido en ascenso desde el año 2003 en que editó su revista Pallakmarka, con un CD digital adjunto, hasta mostrarnos una dedicación intelectual exigida en varios campos, que constituyen aportes al pensamiento histórico, filosófico y cultural de la región. Se trata de dos textos de formato amplio de más de 350 páginas cada tomo, que contiene en el primer tomo el rescate de una literatura oral, mitos y leyendas de nuestro altiplano, así como la narrativa tanto en sus géneros como cuento y novela, aquí debemos destacar las fotografías seleccionadas de la ciudad de Puno, a personajes ilustres, así como la selección de pinturas de David Frías, José Luis Barriga, Benigno Aguilar Paucar y la novedad de las pinturas de Diego Kunurana, hermano de Gamaliel Churata proporcionado por Pedro Pineda Aragón. En otras colaboraciones se destaca el aporte de la Biblioteca Municipal, El Centro Documental del Gobierno Regional y el Archivo Histórico Departamental. El segundo tomo corresponde a dar contenido a la Poesía Puneña en sus diversas generaciones, al teatro, y al Ensayo Puneño donde se insertan principalmente crítica literaria y artística. Este trabajo forma parte de la estructuración del Proyecto Curricular Regional que por estos días se encuentra presentándose en el Congreso de la República, a fin de que pueda en algo cambiar la visión tubular y no pluralista de nuestra educación peruana, donde Puno pueda constituirse en una experiencia piloto de tan pretendidos cambios.



Aunque la difusión de estos textos sigue siendo restringida, no por ello podemos dejar de comentar su importancia y su contribución que en definitiva significa llenar el vacío que hasta ahora subiste sobre el desconocimiento de la Literatura Regional, en diversos niveles educacionales, incluso en nuestra misma Universidad donde casi recientemente se han impulsado cursos referidos a la literatura regional. La estructura curricular propia es lo que tiene como finalidad la apuesta del contenido del presente trabajo. Por lo que este es un primer mérito, y el segundo es haber logrado privilegiar los textos, más que las referencias de los autores, para mostrar la evolución de nuestra literatura, y dejar que sea el lector quien aquilate el discurrir de una literatura que ha dado mucho que hablar y actualmente también suscita muchas expectativas.



Del primer tomo nos permitimos comentar la creación de mundo, a través de los diluvios tanto Aymara como de Wiracocha, los orígenes a través de los mitos Inkariy y Qollariy, el origen del Arco Iris, el gran día de viento, y las primeras narrativas orales como el Anchancho, el pleito del Gallo con el Pucupucu, los ritos y ceremonias en torno al Lago Titikaka. En la parte de la tradición, el relato y el cuento, existe el rescate de Narciso Aréstegui como uno de los iniciadores de la narrativa puneña, Telésforo Catacora, José Antonio Encinas, Alberto Rivarola, de quienes vemos que se abren en otras facetas que no son las que conocemos de ellos, y que con igual solvencia intelectual demuestran una férrea puneñidad, después vendrán los conocidos Gamaliel Churata, Mateo Jaika, rescatando a otros como Lizandro Luna, José Portugal Catacora, Oscar Velasco Meza, Rubén Ponce Alvarez, hasta los últimos como Waldo Vera y Elard Serruto, pasando por Luis Gallegos, Omar Aramayo, Jorge Florez-Áybar, Feliciano Padilla, lo interesante de todos estos relatos es que tiene como eje nuclear su motivación sobre Puno, su escenario, sus costumbres, su religiosidad, y cosmogonía, que efectivamente hacen una unidad en lo que se quiere mostrar de lo hecho por autores que sintieron a Puno en lo más hondo de su ser, por lo que en este tomo se hace un despliegue nada apretado de nuestra Literatura, donde las imágenes, los comentarios, las fotografías e ilustraciones encuentran una sincronía agradable a la vista y a la información necesaria sobre el quehacer narrativo en nuestra región.
Del segundo tomo, podemos comentar una selección de poemas un tanto vasto y suficiente, que arranca con la poesía oral, y luego con los clásicos de nuestra poesía puneña que es imposible prescindir como Gamaliel Churata, Dante Nava, Alberto Mostajo que es reivindicado con justicia y valoración, siendo una novedad el rescate de Manuel Z. Camacho como poeta. En la introducción a este tomo se recoge un comentario de un taller de escritura creativa de Barcelona, donde se dice que: “La poesía no puede transmitir información, si lo haría dejaría de ser poesía”. Lo que de modo particular es polémico, ya que en esa línea estaríamos negando a poetas como Homero, Borges, Paz, Neruda, y al propio Vallejo y Churata, cuando considero que una función básica de la poesía es crear conciencia justamente a través del contenido poético que se transmite. También recoge la propuesta ya lanzada por Omar Aramayo de los momentos de la Poesía Puneña, que en el presente caso, se considera siete momentos, que es un modo temporal o generacional de apreciar la evolución de nuestra poesía, éste tomo culmina con una selección de ensayos críticos. No es fácil atreverse a hacer una muestra o una antología de poesía sin caer inevitablemente en ser en algo arbitrario, donde no pueden estar todos, y donde no siempre se puede conjuncionar en criterios de consenso. Particularmente me parece bien que de los poetas últimos, se establezca como criterio el seleccionarlos un cierto establecimiento en el quehacer poético, y señalar que debe esperarse una obra mayor o una labor permanente para poder apreciar con mayor amplitud su poética sostenible en el tiempo. Poetas como Jesús Cáceres, Vladimir Herrera, Jovín Valdez que en otras antologías son obviados, no son rescatados, ahora se le da su lugar que permite ser mejores re-apreciados, con poemas que justifican su inclusión. En suma se trata de un panorama importante de nuestro quehacer poético.



Finalmente, es necesario señalar que los homenajes a Dante Nava, a José Paniagua Núñez, hechos últimamente demuestran y justifican un sitial que relativiza, criterios que quizás de modo injusto los prescinde de las antologías de poesía puneña. También es oportuno felicitar el esfuerzo de Henry Esteba, por su muestra de Literatura Regional, editada recientemente, con otro criterio diferente para no ir con la corriente del canon y su centralismo, sino más bien con una propuesta descentralista donde por cada provincia se registran poetas y narradores representativos, que nos permite apreciar de modo diverso que en este vano oficio, hay pulsaciones que desde los confines, día a día construyen con versos la región y el país, de repente no debió de estar ausente algunos comentarios muy puntuales pero, en la perspectiva que comentamos se logra su propósito. Con propuestas como la de José Luis Velásquez y Henry Esteba, se hace cohesión y puneñidad, para ellos y para los auspiciadores felicitaciones por su contribución a nuestra cultura.


jueves, 1 de octubre de 2009

instituciones educativas privadas: la gran estafa




José Luis Velásquez Garambel

En los últimos años, Puno, no sólo como ciudad sino como región, es un espacio en el que se viene dando un crecimiento desmesurado de instituciones privadas, en algunos casos con cierta preocupación por la infraestructura pero con una selección desesperante en sus docentes. Y en otros casos una pésima infraestructura pero con recursos humanos que se esmeran en entregarlo todo.

Pierre Bordieu, un eminente sociólogo, que además se dedicó a desarrollar sesudos trabajos en torno a la educación manifestaba que la educación privada estaba dirigida a crear una especie de elite, una educación que se diferenciaba de la brindada por el estado, con mejores docentes, con mayores comodidades, con mejores contenidos, con una ideología compartida y direccionada a lograr una violencia simbólica mediante la acción pedagógica que se practique en dichas instituciones, para lograr imponer una arbitrariedad cultural, que debía ser portadora de “calidad” o de un discurso superior al de los que se socializan en los centros estatales.

Nadie puede negar, que el acceso a este derecho (el de la educación) ha caído en manos de verdaderos mercaderes, que en realidad lo único que hacen es lucrar, explotar y por si fuera poco no cumplir con las expectativas de los padres de familia ni de sus trabajadores.

Al hablar con un egresado de la carrera de educación (a la sazón ex-alumno mío), oigo un testimonio desolador, que con los días voy ratificando con otras conversaciones con más ex-alumnos que se hallan trabajando en algunas instituciones. El panorama que me grafican es realmente triste. La mayor parte de las instituciones privadas no firman contratos con sus trabajadores, en muchos casos no cumplen con el pago de sus haberes a pesar de exigirles a los padres de familia pagos puntuales. No cuentan con proyectos institucionales, ni qué decir con los requerimientos infraestructurales mínimos para su funcionamiento, así sus directivos se ufanan de “vacas sagradas” que juegan con las expectativas de su personal docente.

Obviamente, la única preocupación de sus directivos es lograr ingresos económicos y para ello recurren a todo tipo de lobbis y publicidad engañosa, que atrapan a padres incautos que desean lo mejor para sus hijos y en tremenda búsqueda lo único que encuentran son reverendas estafas. Así, pomposamente, tenemos instituciones con logros académicos rimbombantes sólo en la publicidad, pero en la realidad nada de nada, también existen instituciones católicas que usan la propaganda de “educación en valores” como propaganda y ni el nombre les otorga esa calidad moral que tanto predican, para ello sólo es necesario observar el comportamiento de sus estudiantes. Sin embargo hasta el sólo nombre, en algunos casos, es un atentado contra la cultura regional, puesto que representan una clara enajenación de identidad, a tal punto que sus propios directivos no saben lo que significa o representa.

Pero no sólo son las instituciones privadas, en la otra esquina tenemos a las instituciones estatales ¿Qué podemos esperar de las mismas? Que deberían responder a necesidades urgentes, populares y de verdadero compromiso con el desarrollo de la sociedad. Su imagen está cada vez más deteriorada, ya que estas instituciones se han convertido en reducto de personas que llegaron al magisterio por una rifa que el gobierno aprista realizó en su primer gobierno. De lo contrario sólo hace falta que nos fijemos que en los concursos de argumentación, redacción y demás que continuamente organiza la DREP desde hace un buen tiempo ninguna de estas instituciones de la ciudad de Puno ha logrado un galardón reconocible y hasta un papel digno. Rol opuesto al trabajo desarrollado por las instituciones de provincias, a quienes hay que reconocerles el esfuerzo. (Para observar el asunto este ver la edición de este domingo).

miércoles, 30 de septiembre de 2009

Sunkhunchispa Takin: Cantos del corazón



Juan Luis Cáceres Monroy

Tengo en mis manos “Pakasqa Takyniykuna” con el subtítulo de “Mis Cantos Ocultos” que Feliciano Padilla nos presenta. Es un hermoso poemario escrito en quechua por su autor y traducido al Castellano por José Luis Velásquez Garambel. Son poemas escritos en Runa Simi, llenos de sentimiento en el que el poeta expresa con gran ternura sus vivencias andinas, lo íntimo de los pueblos que lo vieron crecer y vivir entre quienes habitamos el espinazo de los Andes y compartimos con nuestros Apus el rico y vigoroso mundo que nos rodea. Entre colinas y lagos nos hemos acercado a Dios, al mundo y al hombre, compartiendo con ellos nuestras vivencias y dialogando con el corazón entre todos.

El libro muestra el nivel de dominio que tiene Padilla de este idioma nativo del Perú: el quechua, escribiendo con rigurosidad en el nuevo sistema creado para esta lengua, que originariamente sólo fue oral. No podía ser de otra manera, ya que Padilla estudió este sistema en la maestría de Lingüística Andina y Educación con grandes maestros como Cerrón Palomino y otros. Además, el dominio del idioma lo adquirió de niño, casi como lengua materna, en Abancay donde aprendió a querer, a mirar el mundo, la vida y el hombre con espíritu andino, en una convivencia entre lo hispano y lo indio.

Por lo tanto, el libro es una expresión andina de la cultura, en el que Padilla abre su corazón y expresa con un elocuente uso del quechua los sentimientos del hombre que vive en los Andes, compartiendo con su entorno las experiencias del diario vivir e intercambiando sentimientos y acciones.

Por esto, “Haykurina” expresa lo que hace todo andino: una introducción pidiendo permiso a los dioses, al mundo y a los hombres para iniciar cualquier obra cuya grandeza trascienda. Invoca a los a los Apus y dice: “Unanchaykuwallayku (dadnos su bendición), y, luego de seguir invocándolos como señores, exclama Amachaykuwallayku (dadnos su protección), luego hace referencia a los hombres, vivos y muertos para ofrecernos su canto. En este poema lo andino sale a flor y se deja escuchar en la voz del poeta.

El corazón del poeta se abre y nos muestra su grandeza y fidelidad, en cantos de amor que expresan puro sentimiento, como en “Qhachquyta Kichariqtinku” (Cuando Abran mi Pecho) “Cuando abran mi pecho,/ al fondo de mi corazón/ sólo encontrarán tu nombre// Cuando sajen mi cabeza/ grabado en mi cerebro/ sólo tu rostro encontrarán.// Abriendo el fondo de mis pupilas/ por haberme mirado tanto,/ encontrarán tus ojos”(PADILLA:13). Todos los cantos de amor muestran gran ternura y explotan la riqueza expresiva del quechua, en este sentido. Explotan lo expresivo que tiene en el uso de morfemas marca que expresan sentimiento (cha, y, ni, etc.) cuya traducción al castellano es muy difícil. Estos cantos se inspiran en los harawis prehispánicos.

Algunos poemas se inspiran en personajes nativos como el balsero o el indio, a semejanza de la corriente indigenista., en ellos la intención es reivindicar a la cultura y expresar admiración por ella. En “Walsiru Maykamaraqmi Rinki” se hace una apología del balsero, cuya cabeza es la del cernícalo pues como él divisa desde lejos, lo que le posibilita desplazarse dentro y fuera del mundo, sufriendo y gozando con el mundo: “Nadie sabe de tus sufrimientos/ en el lago titiqaqa/ Nadie sabe que tu llanto/ hace crecer al lago” Estos poemas tienen la comunión con el mundo en torno, porque el hombre participa de su vida con el paisaje, con la tierra.

Del alma quechua surgen los poemas que aluden al paisaje y a la vida, a la naturaleza. Tienen el aliento de los Wakatakis quechuas. Los referidos a los animales aprueban o desaprueban la conducta de los animales y sus defectos o virtudes tienen que ver con la conducta del hombre. La libélula es mensajera de los hombres, su presencia augura noticias desconocidas, premoniciones o penas cuya distancia se aleja más con el tiempo: “Libélula, libelulita mía,/ ya no rondas mi casa/ Antes, sin embargo,/ desde mi puerta con tu lindo rostro/ me mirabas dulcemente” El zorrino asqueroso, anuncia males, desgracias, penas, por lo que el poeta, también le desea males, en una expresión típica de la reciprocidad andina: “Cuando camines por el cerro,/ el zorro o el puma/ te maten cortando el cuello”.

La tierra y sus frutos, son motivo de canto. En este caso es alabanza a la pacha mama y al trabajo del hombre. El poeta asume su carácter andino y valora lo que produce la tierra, lo que es propio de la sierra peruana que ha servido para que los hombres vivan. En Papa Sagrada, se enorgullece de su origen andino y sagrado, de la interacción entre el hombre y el producto, asumiendo una actitud de protección y suplicándole que no desaparezca, arguyendo que los hombres quieren convertirla en bioenergía, arrebatándola de las bocas humanas para convertirla en alimento de carros y aviones. Apela a los dioses tutelares para que la defienda, ofreciendo la vida a cambio de su permanencia en el mundo: “Sagrada papa mía,/ si deseas yo te daré mi vida;/ mejor calma tu sed con mi sangre/ pero que la papa no me deje/ ¡Sagrada papa, no me abandones!”(Veláquez traducción:en Op cit:92)

La obra es una revaloración del quechua, porque en ella se muestra la gran calidad expresiva de esta lengua. Su lectura nos muestra el inmenso valor de esta lengua cuya estructura permite una sonoridad armoniosa, en cuyo ritmo y melodía se encuentra el alma. En este caso un alma grande: El alma andina de Feliciano Padilla. Felicitaciones.

S O L I L O Q U I O



Américo del Campo


El individuo que atormentado por problemas existenciales toca fondo, puede superar ese punto de quiebre y transformar positivamente su personalidad. Ese tipo de cambios cualitativos sucede también en la sociedad, en cuya estructura social vieja con visos de muerte, anida el germen de una nueva sociedad. ¿Recurrencia fatal de la historia, como señalan pensadores geniales? La historia misma confirma esa evidencia. Por esa razón, para esta primera década del siglo XXI, la humanidad que está en su punto de quiebre por causa del neoliberalismo, calentamiento de la tierra y ceguera espiritual, paradójicamente posee claridad mental que le posibilita lúcidos y positivos rumbos. Así que éste es tiempo de reflexión, de acción no sólo hacia afuera sino primordialmente hacia adentro. Mas ¿Podrán reflexionar políticos y religiosos de todo pelaje que no saben qué hacer con las mentiras acumuladas en sus programas y doctrinas? ¿Podrán reflexionar los capitalistas que se pudren en dinero? ¿Podrán reflexionar los corruptos que infestan la sociedad mundial?

Bien, así doy rienda suelta al monólogo de este día:

A las transnacionales que se devoran entre ellas y que se engullen a empresas públicas y privadas menores, así como a los gobiernos poderosos que hacen estallar guerras hipócritamente en nombre de la paz, no les interesa la vida en el planeta. Son pues los jinetes del apocalipsis. Parte de aquella avalancha siniestra la conforman los fabricantes de armas y el fanatismo de políticos y religiosos que creen poseer la verdad. Ante tamaña falsedad, a mí, como a otros, me ilumina la sensatez. Por eso opino de la siguiente manera: La humanidad se derrumba por la espiral decadente porque el hombre sigue ignorando el conocimiento y dominio de sí mismo. Del inconsciente, constantemente, emergen sentimientos negativos que perturban al consciente, haciendo que la persona cometa crasos errores, agreda, mienta y racionalice (“justificación lógica y consciente de un comportamiento que revela otras motivaciones inconscientes”). Un ejemplo simple de racionalización: En un debate institucional, alguien que encuentra en otro certeros argumentos, siente envidia en el inconsciente y conscientemente impulsado por esa envidia, refuta por refutar, con aparente serenidad y sin argumentos válidos; justifica su intervención diciendo que lo hace con el sano propósito de aportar ideas. Así pues, la mayoría racionaliza y los que razonan son egoístas, ególatras, egomaníacos, egocéntricos, egotistas, por supuesto que con excepciones, porque si no fueran por éstas, ya no habría nada alentador en qué creer e incluso soñar.

Prosigo con esta auto “disertación” que, estoy seguro, para muchos resultará estridente, obnubilada y perturbadora:

El Yo consciente no va a la par con el Yo inconsciente, razón por la que es fundamental en la vida encontrar equilibrio entre consciente e inconsciente. Un gran maestro espiritual dice “hay que convencer a ese monstruo estúpido, rabioso y escondido del inconsciente”. Sigmund Freud afirma que “hay que desenmascarar al inconsciente disfrazado de neurosis”. Esas dos afirmaciones se refieren al conocimiento y dominio de sí mismo. En diferentes culturas de la antigüedad se enseñaba el conocimiento interior del ser humano para su desarrollo integral, para alcanzar equilibrio emocional y sano juicio. Enseñanza que, a lo largo de milenios, fue de conocimiento secreto y de élites. La gran mayoría permanecía víctima de los arranques del inconsciente, del ego que es egoísmo y causa de la desdicha humana, con sus funestas expresiones de lucha por el poder, el dinero y la fama. Por eso, la injusticia con sus guerras y brechas gigantes entre pobres y ricos, caracteriza a la humanidad desde siempre. Sin solución hasta el momento, primera década del siglo XXI, porque se sigue insistiendo sólo en el cambio externo (social, político y económico) que sin duda es fundamental; pero no en el cambio interno del ser humano, necesario e imprescindible para que éste adquiera equilibrio emocional y sea eficiente en la lucha por la justicia social. Este concepto sobre el cambio positivo del ser humano, tan despreciado por la intelectualidad soberbia, hay que repetirlo constantemente. ¡Cambio social y cambio individual deben ser complementarios!

Todos hacen su propio mundo. Con sus deseos, ilusiones y creencias, aplastados por convencionalismos e influencias casi siempre negativas que los convierte en piezas del engranaje social rutinario y mediocre. Se liberan de la esclavitud de ese engranaje quienes escudriñan dentro de sí mismos y quienes son contestatarios ¿Una de las peores lacras de la humanidad? : Los enfrentamientos armados, con sus falaces justificaciones. La discriminación racial, abierta o hipócritamente disimulada. La mentira de la mafia de poderosos que gobiernan el mundo. La supremacía de la mente racional y racionalizadora (término que ya definí y al que se le debe prestar atención). De modo que no se trata de una sola lacra, sino de varias. Muchos principios se han desvirtuado en el mundo. El poeta tiene la palabra: “Cuántos sonidos, cuántas voces, ni sonidos son, ni voces. Como el hierro candente, nos abrasa el hierro helado. Pájaro azul de lejos, no parece azul de cerca”. ¿Que si soy un triunfador? Yo no vivo la vida como si ésta fuera una competencia y no pertenezco a la jauría de triunfadores y perdedores. Soy un individuo libre para ser yo mismo y vivir mi propia vida con serenidad, gozo y servicio. No, no soy filósofo. Soy un simple hombre que habla simplezas que brotan de ese mar profundo de la experiencia; pero de una experiencia de tribulaciones fecundas y no de sufrimientos infecundos. Los filósofos son controvertidos soñadores de posibilidades e imposibilidades; son siempre pensamiento vivo.

Voy por los incomprendidos y despreciados caminos de la meditación. No, no pertenezco a ninguna religión terrenal. Practico la religiosidad cósmica. ¿Amigos? : Pocos, y a bastante distancia. La amistad parece que fuera sutil reciprocidad de oportunismos. No obstante, respeto a mis amigos leales. Antepongo principios a la simple relación familiar y amical. Por supuesto: me ubico en la trinchera de ideas antiimperialistas. Todos pues somos parte de la enmarañada vida repleta de errores, debilidades y sobre todo autosuficiencias. ¿El amor? Es el bien y se ramifica en amores paternales, maternales, filiales, de pareja y otros más por allí. Es egoísmo cero, es dar sin esperar recompensa, como el de los padres a los hijos y a veces como el de éstos a aquéllos. El amor de pareja puede ser sincero al principio, después es rutina, aburrimiento o conveniencia recíproca. Hay excepciones por supuesto. ¿La infidelidad en la pareja? Es problema de mayorías, porque la pasión amorosa y sexual se debilita con el tiempo, debido a que no hay confianza y conocimiento entre cónyuges o convivientes. El fracaso amoroso y sexual de varones y mujeres es rotundo, porque se desconoce la transmutación sexual, el idilio y erotismo sublimes.

Volteando la página: ¿Qué una obra literaria no resuelve problemas sociales ni emocionales? Correcto. ¿Qué los literatos son vanidosos? Correcto, pero no sólo ellos. Por lo menos le dan un toque humano a la vida. Exponen hechos sociales y psicológicos valiosos. En los diferentes campos del saber, hay personalidades con obra meritoria, de trascendencia y hasta genial en ciertos casos; pensadores comprometidos con la justicia social y la paz. Mas, hay aspectos intrincados que enturbian el saber: Mucha especialidad y términos creados en lo económico, político, social, artístico, etc., ¿Para qué la economía como ciencia, si da por resultado un fracaso estrepitoso del manejo económico mundial? ¿Para qué los “ismos” literarios y artísticos? ¿Banalidades y soberbia intelectual? Mucha parafernalia que atiza vanidades. Para mí la cosa es clara: Los científicos y humanistas, vocacional y profesionalmente pueden ser gente realizada, pero muchos de ellos con inteligencia emocional deficiente. Los artistas, siempre controvertidos. Veamos: Al pintar un cuadro, escribir una partitura, un poema o una novela, el creador goza creando y listo, eso es lo más significativo. Si hace conocer su creación se sentirá mucho mejor, siempre que no se apasione por la fama. Si esto último sucede, se hunde en ambiciones delirantes, tormentos emocionales, y sufre miserablemente. Y cuidado: esto caracteriza a la mayoría de creadores. Casi a todos. El hecho es simple y natural: Cada creador tiene su propia medida. No puede ir más allá. El talento es un don dosificado. Si no se es consciente de esa verdad, también se sufre. Lo natural y correcto es que el talento de inventores y creadores merezcan reconocimiento justo. Lo reprobable es el culto a la persona y la fama engendrada por el marketing. Por la misma vertiente: La crítica en cualquier campo es opinión eminentemente individual y nada más. No significa lineamiento ni guía. En literatura hay críticos con posturas autosuficientes. Yo voy directo a la obra y obtengo mis propias conclusiones. En esto soy también libre, independiente. ¡Cuidado!: El siniestro Club Bilderberg conformado por multimillonarios, banqueros, políticos, periodistas, científicos sociales y otros ejecutores de la derecha, que manipula la opinión pública reaccionaria, también manipula concursos y eventos literarios para encumbrar a literatos (unos meritorios y otros no) defensores del neoliberalismo. ¡Cuidado con los que venden su pluma! Bien, analizados así los límites y sesgos de las opiniones en general, tanto a escala mundial como particularmente en el Perú gobernado en este 2009 por el Apra proimperialista, puedo calificarlos de arrogantes y serviles a esos políticos, economistas, literatos y periodistas, acérrimos defensores del capitalismo y con acceso a la mayoría de medios de comunicación, desde donde mienten, calumnian y azuzan, protegidos por la falaz democracia representativa que defienden.

¿Sólo palabras, palabras y más palabras? No. Son realidades que muchos no ven. Más que las teorías económicas y políticas puede la ambición de poder, fama y dinero, que es la que perfila modelos ineficaces de gobierno sustentados en la injusta economía no equivalente y crematística (enriquecimiento de unos pocos a expensas de las mayorías)

¿El cielo y el infierno? Están dentro de uno mismo. Salí del averno, fortalecido y experimentado. El infierno: rencores, odios, envidias, avaricia y otros males del alma. El cielo: paz mental por hacer lo correcto y enmendar constantemente los errores. La Biblia dice que los homosexuales y los borrachos no entrarán al reino de los cielos. Yo entiendo esto de la siguiente manera: Si el homosexual acepta su homosexualidad, se libera de dependencias malsanas y se realiza correctamente, tiene paz mental (cielo); si hace lo contrario, permanece sujeto a sus conflictos emocionales (infierno). Si el alcohólico se rehabilita de la enfermedad del alcoholismo, tiene paz mental (cielo); si no se rehabilita, permanece sujeto a sus conflictos emocionales y vive muriendo (infierno). Sencillo ¿no?

Sí, casi toda la humanidad se encuentra en tinieblas, pero siempre con posibilidades de humanizarse y aun de divinizarse. ¿El arte? Creación que nos recuerda que somos humanos. ¿La política? Guerra a muerte entre los de arriba y los de abajo. Para los de arriba la política es lodazal de egomanía y maldad. Para los de abajo: surco de acción justa. ¿La democracia? Soy terminante en esto: La democracia formal, burguesa, occidental o representativa es el caparazón que protege a los poderosos y explotadores, con sus políticos, intelectuales, periodistas, literatos y otros serviles. La democracia directa o participativa es inherente a la justicia social. El autogobierno es lo justo ¿La corrupción? Es podredumbre moral, perversión, soborno a funcionarios, robos pequeños y grandes en lo privado y público. Es un mal social que cubre todo el planeta y sus causas son de origen natural (gente de mala entraña) y cultural (formación alienante). El ser humano, siempre con excepciones, tiende a apropiarse de bienes ajenos. El hombre nace con esa tendencia y la agranda dentro de una sociedad también corrupta. ¿Sin remedio? Casi sin remedio, porque la podredumbre, en milenios, logró degenerar la moral del hombre. Felizmente no de todos. Hay muchas personas honestas. Siempre hubo, hay y habrá gente honesta.

¿Qué aconsejaría a los jóvenes? Les diría que sean auténticos y libres, que no dependan de convencionalismos, drogas, sentimentalismos y señuelos tecnodestructores. ¿A qué organización me gustaría pertenecer? Apartado de la praxis social que fue intensa en mí, ahora sigo siendo un soñador más del movimiento libertario. ¿Qué edad tengo? Los suficientes años de experiencia y reflexión, y ya sobre la base siete ¿Qué cosas quisiera que no vuelvan a suceder?: Muchas, muchísimas. Casi todo o mejor dicho todo lo que el hombre ha desvirtuado. ¡Ah!, que Jesús el Cristo no retorne, porque lo volverían a clavar en el madero, con más saña, regocijo y odio. Jesús criticó, estigmatizó y combatió a los ricos. Ahora éstos dicen luchar contra la pobreza engendrada por ellos. Y se autodenominan cristianos. ¡Fariseos a la ene potencia! ¿Quién es el rico?: El que tiene más de lo necesario suficiente, estigmatizado como prepotente y explotador. Y qué es lo necesario suficiente: trabajo honesto, economía básica, actitud correcta, ausencia de suntuosidad. ¿El pobre?: El que no tiene la economía básica para vivienda, alimentación, educación y salud. ¿Por qué tremenda injusticia en el mundo?: Por el egoísmo de los ricos que ambicionan insaciablemente. ¿Y el pobre que se hace rico, por algún azar del destino? Es pues otro rico más, con ambiciones insaciables, salvo que tenga sensibilidad social. Entonces lo justo es tener lo necesario suficiente. Pero para esto uno debe desarrollar la faceta humana, humanista y humanitaria de su ser.

¡Qué tal ser humano y qué tal ambivalencia que nos caracteriza! En sólo unos minutos podemos cruzar límites del bien y el mal. Podemos ser bondadosos y crueles. Hechos para la libertad y justicia así como para la injusticia. Esto es evidente en estos primeros años del siglo XXI, porque se tiene una visión más amplia del hombre. Hoy, en hora buena, el estudio de la naturaleza humana ocupa lugar importante en el análisis sociológico y el fanatismo religioso es superado por programas espirituales que activan cambios positivos en el individuo. Y, como parte de esta certera concepción de la vida, surgen movimientos que marcan nuevos rumbos reivindicativos en diferentes lugares del mundo. El anhelo de libertad y justicia impulsa a esos movimientos. Así que no sólo el agravio –como sostienen algunos sociólogos es causa de la acción colectiva que confluye en los movimientos sociales. Es la fuerza vital de libertad y justicia que por naturaleza anida en el lado bueno del ser humano. Es más, dentro de los movimientos sociales surgen líderes innatos que conducen en mejor forma que los cuadros de los partidos políticos de la izquierda tradicional. Y, como luz auroral, fructifican los movimientos indígenas de América (Abya Yala), que aman la tierra, la libertad y la justicia. Esto, por cierto, encoleriza más a los racistas de derecha como el literato Mario Vargas Llosa, quien dice la siguiente barbaridad: “hay que modernizar a los indios aunque haya que sacrificar sus culturas”. Así es, los personajes cultos reaccionarios, soberbios y falibles, casi siempre lanzan conceptos retrógrados. Al respecto, en su visita reciente al Perú (enero 2009), el escritor mejicano Carlos Monsiváis, una de las mentes más lúcidas de América Latina, estampó esta frase lapidaria: “En América Latina y en el mundo, la derecha ha emitido tal cantidad de disparates que recordárselas es enmudecerla, a menos que tenga una dosis proporcional de ignorancia y cinismo”.

Sí, sí sé que mis conceptos son inusitados y quizá hasta extravagantes en algunos puntos. Mas, reafirmo todo lo dicho en contra de la opinión oficial. Soy pues contestatario incontrastable. Logré el conocimiento necesario para ubicar bien mis reflexiones críticas. Digo lo que debo decir, convencido de lo que sé. Y, con los pies firmes sobre la tierra, veo al final del túnel aquella luz tan esperada por los inconformes con la sociedad alienada y consumista.

domingo, 27 de septiembre de 2009

OMAR ARAMAYO NOS ACLARA A QUIEN PERTENECE LA DIABLADA, ¿AL PERU O A BOLIVIA?

Viernes 28 de Agosto de 2009 14:46 .

Debido a la controversia sucitada a raíz de la polémica que despertó el uso del Traje de la Diablada por parte de Karen Schwartz en el certamen de belleza internacional Miss Universo 2009, ha surgido la polémica y a la vez, un halo de incertidumbre en las relaciones Perú-Bolivia, a consideración nuestra y del mundo entero, la pregunta fundamental que aparece como trasfondo a todo este conflicto sería, ¿La Diablada pertenece al Perú o a Bolivia? Para despejar nuestras dudas tenemos a Omar Aramayo Decano de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de la UAP y Folclorólogo Peruano, que se pronuncia respecto la polémica que generó el origen de esta danza. -Cabe recalcar que nuestra mis Perú, Karen Schwarz, lucio con la cabeza en alto, la vestimenta de la diablada.


¿Qué opinión merece las diferentes controversias que ha originado esta vestimenta entre países vecinos (Perú – Bolivia)?


Tiene una parte buena, porque nos permite poner en tela de juicio y realzar sus valores, que muchas veces pasan desapercibidos, o por sobreentendido y que son la expresión de un capital simbólico de inmenso valor.

Obviamente que Karen Schwartz se debía lucir con la cabeza en alto, no sólo por la notable belleza peruana, sino porque de otra manera con la fuerte competencia es fácil que “la máscara se le venga abajo”.


¿Cómo nace la Diablada en la historia?


El nacimiento y desarrollo de la danza de La Diablada es produacto de un proceso histórico largo. Su imaginario aparece por primera vez en la cerámica y orfebrería Mochica-Chimú y en la escultura lítica Pucará. Tiene elementos cromáticos y formales chinos y tibetanos; y un tercer elemento: La vestimenta sacra cristiana, que fue usada como una profanación en el siglo XVIII por los túpacamaristas en los pueblos de Puno, Chucuito, Llave, Juli, Pomata, Yunguyo, Desaguadero, Sorata y otros. Su argumento principal es la lucha entre ángeles y demonios pintados por los pintores indios, especialmente en un templo que se viene reconstruyendo en La Raya, entre Puno y Cuzco.


SEGÚN LA HISTORIA ¿A QUIÉN PERTENECE LA DANZA Y LA VESTIMENTA DE LA DIABLADA?: ¿Cuál es el significado de la diablada como vestimenta y baile?


Según la historia, para un enfoque justo y académico debemos atenernos a mapas culturales y no políticos. Bolivia y Perú son dos naciones contemporáneas, modernas, establecidas sobre viejas naciones, como la Quechua y la Aymara. Bolivia es un país que no tiene más de 250 años y es territorio que perteneció al Alto Perú. Bolivia es hija del viejo Perú y sus creaciones culturales pertenecen a ese estado.


La Bolivia actual ha producido muy pocos bienes culturales en relación a la historia antes de 1826, cuando pertenecía al Alto Perú.


La danza de La Diablada está ofrecida al Tío ó Anchancho, que es el espíritu dueño de las minas. Es una danza de los mineros. Se danza para propiciar la extracción de minerales. Por eso aparece en Puno, que tiene su fundación española, porque los españoles descubren las riquísimas minas de plata de Laicacota. -para ello ver el libro de Jorge Basadre 1937-.


¿Cree usted que Evo Morales menciona la diablada como patrimonio boliviano, con un fin político?


Evo Morales toca el tema de una manera impropia, debido al extraordinario desconocimiento del tema cultural y a la falta de tino de sus asesores. No olvidemos que el señor Morales es completamente autodidacta, sin desmerecerlo claro.


¿Desde qué punto de vista la diablada es peruana?


La diablada es peruana porque se originó en el Perú, se ha desarrollado en el Perú y porque miles de puneños la danzan en un calendario dancístico durante todo el año y especialmente en la Octava de la Virgen de la Candelaria.


¿El resurgimiento de nuestra historia y atractivos culturales es gracias a que el turismo se haya centrado en Machu Picchu?


El Perú tiene mucho que ofrecer. Señalamos los siguientes seis puntos:
1) Machu Picchu
2) Las Pampas de Nazca
3) El Río Amazonas
4) El Cañón del Colca
5) La culinaria
6) El Folklore
7) El Turismo vivencial
Desgraciadamente no existe una política cultural ni existe una adecuada política para el turismo. Por ejemplo, hay más ingreso a Machu Picchu por La Paz Bolivia que por Lima.


¿Cuál es la diferencia de nuestra cultura ante los demás países, como Bolivia?


No olvidemos que el Perú es Padre y Madre de gran parte de las naciones del continente. Es el inicio y el origen de la Cultura en América del Sur y una de las siete cunas de la cultura de la humanidad. Por ejemplo. El sol que luce la Bandera de la Argentina, es el sol de los Túpac Amaru.

COMO PERUANOS ¿DE QUÉ MANERA CONTRIBUIRÍAMOS LA MEJORA DE NUESTROS LEGADOS PERUANOS: ¿Cómo proteger nuestro patrimonio cultural ante los demás países? ¿Tendríamos que patentarlos?




Como peruanos debemos respetar y cultivar los valores nacionales. Exigir a los gobiernos que se implemente una política cultural. El Perú es uno de los pocos países que no tiene Ministerio de Cultura como lo prometieron el Dr. Alejandro Toledo y el Dr. Alan García.



¿Por qué no se promueve el turismo interno con costos más económicos para el peruano?





No existe una organización del Turismo en el Perú. Sí, un gran caos. El Viceministerio está dirigido por gente incompetente y lamentablemente siempre ha sido cupo político.



¿De qué manera el Perú puede promover su cultura en el extranjero?



Si comparamos nuestra cancillería en su labor cultural con la de Chile o Argentina para no ir a países europeos, salimos perdiendo.

Buenas Tardes, Muchas Gracias Dr. Aramayo.

movimientos sociales y escuela en el altiplano



ESCRIBE: Feliciano Padilla Chalco


En la Editorial de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos se puede leer un lema muy sugestivo: “La Universidad es lo que publica”. Tiene apariencia nimia, pero, en el fondo, expresa de modo inobjetable la función esencial de la universidad, que es publicar la producción intelectual y científica de sus docentes. Una universidad que se precie de pionera y líder tiene que publicar. Así lo vienen haciendo la “Cayetano Heredia”, la “PUC del Perú”, “Ricardo Palma”, Villarreal, San Marcos, etcétera -sólo por citar algunas de las más prestigiosas universidades del país-. La Universidad Nacional del Altiplano –aunque todavía es poco lo que publica-, como parte de su proceso de reorientación académica, ha realizado durante el último semestre hasta tres publicaciones importantes: “150 Años de Universidad en Puno”, una edición facsimilar de ANDE del poeta Alejandro Peralta y “Movimientos Sociales y la Escuela en el Altiplano” de José Luis Velásquez Garambel. Los puneños tenemos que alegrarnos de que nuestra Primera Casa de Estudios haya, por fin, entendido que la publicación es la forma más fehaciente de justificar su existencia. Una universidad se muestra ante la comunidad académica y ante la sociedad a través de sus publicaciones. “Movimientos Sociales y la Escuela en el Altiplano (1860-1936)” de José Luis Velásquez Garambel es un trabajo riguroso y científico que tiene la virtud de mostrarnos de modo documentado la relación umbilical que se estableció entre las rebeliones y movimientos acaecidos en el Altiplano peruano desde 1860 hasta 1936 con la reivindicación educativa, como uno de los aspectos más sentidos de las demandas socioeconómicas y políticas de las naciones quechuas y aimaras.


No cabe duda que las insurrecciones se produjeron contra la explotación gamonal, por la recuperación de tierras, contra la tributación irracional y las distintas formas de explotación de la fuerza de trabajo del indio. Sin embargo, en todas ellas, desde el levantamiento armado de Juan Bustamante Dueñas ( diciembre de 1867 a enero de 1868) hasta la revolución de Wancho Lima (1923), la educación ocupó el segundo punto de la agenda política de la masa indígena. Juan Bustamante escribió numerosos artículos publicados en periódicos y revistas de la época defendiendo el derecho a la educación de los indios; puntos que posteriormente se sistematizaron en el manifiesto de la Sociedad Amiga de los Indios que exigió la educación de los habitantes con la creación de escuelas en el campo y la ciudad. La revolución de Wancho Lima tuvo indudablemente un contenido político y económico; sin embargo, de las actas y los manifiestos se puede concluir que la educación del indio fue uno de los pedidos más sentidos de los aimaras. Es más, se sabe que, desde inicios del siglo XX funcionaba una escuela clandestina en casa de Mariano Luque o Antonio F. Luque, a donde asistían tanto niños como personas mayores. La actitud indígena favorable a su propia educación es más contundente si recordamos las arengas del presidente Carlos Condorena que decía en 1923: “Si los mistis incendian 05 escuelas, nosotros levantaremos 10, y si queman 10 escuelas, levantaremos 20”.


Los sucesos de Pomata (tres levantamientos que se suscitan desde 1895 a 1900), la acción heroica de Telésforo Catacora por una escuela para obreros y campesinos (Escuela de la Perfección), la lucha de Manuel Alqa Cruz (Manuel Z. Camacho) por la pervivencia de la Escuela de Utawilaya fundada en 1904, las ideas pedagógicas de José Antonio Encinas y otras contingencias sirven a José Luis Velásquez para demostrarnos que la educación nunca estuvo ajena a las reivindicaciones políticas y económicas de la masa indígena. Y, claro, hay una razón de fondo: La lecto-escritura, desde la época de la conquista, había servido para marginarlos, devaluarlos, expoliarlos y excluirlos. Había llegado la hora de apropiarse de aquellas competencias ajenas a su idiosincrasia. Había surgido en ellos una motivación histórica para ser reconocidos como seres humanos y, desde la perspectiva de la otredad, para sentirse iguales a los “otros”, por medio de la educación. La otredad es un concepto legítimo para comprender las diferencias culturales en una sociedad multiétnica como la nuestra y, por ello, se encuentra muy arraigado entre los actores del mundo andino. José Luis Velásquez Garambel, con esta obra publicada por la Universidad Nacional del Altiplano, ha dado un gran salto en su formación académica, al pasar de la simple relación de datos al análisis e interpretación de los hechos que, es en sí, la esencia de la historia. Nuestros historiadores más reconocidos son nuestros maestros, no dateros; son los que guían nuestros pasos, lo cual sería difícil de conseguir si redujeran la historia a la simple apostilla de fechas y datos. Ésta es una obra donde José Luis pone en juego su rigurosidad, su respeto por las fuentes que utiliza, su adhesión a un procesamiento metodológico adecuado y a una sistematización notable que nos confirma que este joven intelectual viene madurando a grandes pasos. Enhorabuena.

(Del Diario Los andes 06/08/07)